30 de agosto de 2014

NOCTURNOS, CHOPIN Y EL PIANISTA



"Chopín en sus nocturnos nos ha hecho escuchar armonías que no solo son la expresión de nuestros mas inefables deseos sino también de nuestra inquietud, sufrimiento y tristeza que demasiado a menudo están combinados. Su vuelo es mas alto pero sus alas están mas gravemente heridas y la suavidad se convierten en una dulzura desgarradora que deja entrever la desolación."  Liszt

De estas maravillosas obras de Chopin las mas populares son Noct. op 9 Nº 2 y Noct. Nº 20 en Do sostenido menor, obra póstuma.
Pero en realidad fue YOHN FIELD, a quien Chopin admiraba profundamente, el que utilizó por primera vez la palabra nocturno; el género nocturno fue considerado como una pieza para piano solo, de un solo movimiento. Una pieza breve, lenta, evocadora.
Surge en el siglo XIX como un género característico del Romanticismo. Chopin crea una nueva fantasía, libre y apasionada, una melodía rítmica distinta, llena de preciosa armonía.

Alfred Cortot opinó sobre los nocturnos de Field diciendo "Precioso, pero vacío marco al que Chopín le sumará, alma, corazón y vida."


En 1945, Wladyslaw Wladek Szpilman, (1911-2000) pianista polaco escribió un relato contando sin rencor y sin juicios descalificadores, como pudo sobrevivir durante la guerra, en Varsovia. El libro autobiográfico se publicó en Polonia bajo el título "Muerte de una ciudad". Censurada por autoridades comunistas esas memorias fueron reimpresas casi 50 años después en 1998, en inglés y otras lenguas. Hoy es considerada como una de las obras maestras de la literatura testimonial del momento. En España se publicó en el 2000 con el título "El pianista del gueto de Varsovia".

Comenzando la guerra, Szpilman puso fin a su carrera tocando para la Radio Polaca el "Nocturno en Do sostenido menor"del incomparable Chopin. Pero en su relato cuenta como salvó su vida interpretando "Balada Nº 1 en sol menor" ante Wilm Hosenfeld (1895-1952) el oficial alemán que lo ayudó a sobrevivir.

Era un pedagogo, educado en la religión católica, buen padre de familia y a pesar de pertenecer a las filas nazis, llegó a salvar a mucha gente sin distinción de origen, raza o religión.
Ante la barbarie de la cual fue testigo exclamó "¿Será que el diablo ha tomado forma humana?

Andrzej Szpilmar (hijo) solicitó al Yad Vashem que reconociera al oficial como "Justo entre las Naciones" titulo que se da a los no judíos que se arriesgaron salvando judíos.
El presidente de Polonia en 2007 le concedió la "Cruz Comandante de la Polonia Restituída" y el 16 de febrero del 2009, es declarado "Justo entre las Naciones". Diplomáticos israelíes entregaron el diploma a su hijo, en Berlín.  

Imagino que más de uno habrá visto la película "El pianista"  
basada en este relato y tan bellamente llevada al cine.  Realizada por Roman Polanski quien al leerlo dijo "supe que sería el tema de mi próxima película". Interpretada por el magnífico actor, Adrián Brody en el 2002,  obtuvo el Oscar a la mejor dirección, guión (Ronald Harwood) y actor protagónico.
Durante los títulos al final de la película, se escucha "La Gran Polonesa Brillante" tocada por Szpilman con acompañamiento de orquesta. 

Con sentidas palabras recordó a aquel oficial que supo ayudarlo y que a pesar de querer devolver el mismo favor, fue imposible hacerlo. En su último diálogo el pianista le pidió que memorizara su nombre por si lo necesitaba como testigo y poder declarar a su favor. Solo pudo decir-"Szpilman, el de la Radio polaca"-.

Ya detenido en 1945 y conversando con un músico, supo que aquel que había ayudado volvió a trabajar en la Radio. Trató de enviarle un mensaje pero el pianista a pesar de buscarlo intensamente no logró encontrarlo porque desconocía el nombre de aquel valiente.
Fue condenado a 25 años de cárcel como prisionero de guerra soviético.

No solo salvó al pianista también entre otros, a un comunista alemán, a un matrimonio polaco y a León Warm  judío. Ya conocido su nombre todos trataron de interceder pidiendo por él pero o nunca llegaron las peticiones a las fuerzas soviéticas o el entorno de Stalin las anuló. Solo pudieron ayudar a su esposa Annemarie.

"El hecho es que toda suerte de canallas y malechores siguen libres, mientras que este hombre, que merece una condecoración, tiene que sufrir." León Warm

Cuando lo condenaron, ya había sufrido varios infartos por las torturas, falta de atención médica y sometimiento, falleciendo en Stalingrado en 1952 en el campo de concentración.

"Hosenfeld fue el único ser humano con uniforme alemán que yo conocí"  
Wladyslaw Szpilman

Finalizada la guerra además de su regreso a la Radio dio conciertos como solista y formó parte de conjuntos de cámara. Dejó en 1986 de hacer giras para dedicarse a la composición.
En el momento de su muerte era reconocido como el músico mas popular de la Polonia de la posguerra; Occidente supo de él después de su autobiografía dada a conocer en ambos idiomas y sobre todo por el éxito rotundo de la película.


Como a muchos grandes hombres el verdadero reconocimiento al talento, a las obras y a las interpretaciones de uno, como la bondad, la fe, el coraje y valentía del otro... fueron póstumas.

Fuentes: www.filomusica.com- www.szpilman.net- www.eticaycine.org- aforjar.wordpress.com- lista.20minutos.es  y otros


2 comentarios:

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Estas son las historias que el mundo debería conocer y tomarlas como ejemplos de vida.

Gracias por compartirla.

Un abrazo.

Chelo dijo...

Una entrada muy interesante e instructiva.
Muchas gracias por visitar mi blog y comentar. Un abrazo